El tenía un aura de amante innato; el hombre perfecto para gozar de los deleites íntimos adornando con ello la vida cotidiana.
Vestido de forma impecable mantenía un aspecto pulcro, casi dictado por un veredicto de su naturaleza; Vestimenta entallada, cabello ordenado, siempre afeitado y con sutiles aromas que encantaban su presencia más cercana.
Siempre mantenía una cortesía natural. Sus movimientos delicados permitían a cualquier objeto florecer entre sus manos.
Se desplazaba en el ambiente como una danza calculada, nunca demasiado visible, nunca demasiado ruidoso.
Su silueta esbelta marcaba su figura trabajada, mantenida en rutinas estrictas de entrenamiento físico. Pero aquello no era imprescindible para aquel que gozaba de un cuerpo escultural tallado por su genética.
Su presencia nunca irrumpía enlugares demasiado sofisticados, ni sobresalía en las sombras de los suburbios.
Se ajustaba al entorno que le rodeaba sin llamar la atención;
Era reservado; no compartía demasiado en sociedad más allá de lo justo y necesario. discreto con el resto, prometía guardar para siempre las experiencias de quienes le conocían y los secretos que ante sus ojos atravezaban.
Tal vez hubo mujeres que imaginaron al hombre perfecto en él, idealizando su compañía eterna a su lado, buscando el modo de capturarlo.
Pero el amante era lo que su esencia sentenciaba; un hombre libre sin someterse al compromiso, o al abandono a los sentimientos de ataduras. Proponía placeres entre las sombras sin entregarse demasiado, nunca confiado, nunca intencionado a quedarse. Una maravilla para las desdichadas sin destino, una espina para los maridos celosos. Un modelo exquisito para encantar los momentos y seducir las oportunidades que insinuaba este ocasional pretendiente.
Extracto de descripción de personajes
El Amante
Idea novela nueva