18 de octubre de 2013

Fragmentos de historias viejas

Durante la noche se quedó en la empresa para terminar de ordenar los documentos.
Alguien la observaba escondido entre las tablas arrumadas en una esquina oscura. 
De alguna parte saltó una chispa a la cortina de la oficina, la cual se prendió enseguida quemándose rápidamente. El fuego se expandió por los papeles, por las carpetas, libros y finalmente el escritorio con el montón de cosas encima. Todo ocurrió tan rápidamente que ella asustada no sabía si correr hacia la calle o tratar de apagar el incendio. La oficina estaba en llamas las cuales se extendían fuera, por la alfombra, por la papelera, hacia las demás oficinas. La persona ocultaba tras las tablas se sorprendió y desapareció. Ella salió corriendo del edificio hacia la calle.

Al día siguiente ella llegó a la hora justa a la empresa. Todos ya estaban allí. Al mirar a su alrededor se asustó mucho; nada había cambiado, a su alrededor todo se mantenía intacto, como si todo hubiera sido un sueño. Al preguntar por algún incidente la noche anterior la miraron extrañados. Alguien entre los demás la comprendía pero tampoco pudo encontrar una respuesta a este enigma. 


... y no recuerdo como continúa la historia.

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